Me gusta como de una forma sencilla y casi cómica nos muestra el antiguo relato, que dice que cuando los dioses crearon a la mujer y al hombre a su imagen y semejanza, escondió la felicidad dentro de ellos, para que así no la encontrarán ya que presuponían que andarían muy ocupados buscándola fuera. Es claro que de haber transcurrido los hechos, tal y como se plasman, a los dioses no les falta mala leche y un buen sentido del humor, ahora bien, fuera como fuese, si que es cierto, que solo puedes encontrar dentro de ti, la felicidad, las pruebas y estudios así ya lo han demostrado, en el exterior podrás encontrar tiritas y parches que podrán ayudarte a matizar ciertos estados emocionales, pero la verdadera felicidad la logras cuando tienes control sobre ti y sobre cómo actúas frente a las circunstancias que te toca vivir, sin dejar que estas puedan modificar tu felicidad por más tiempo del deseable.
También me recuerda la historia de aquél hombre que estaba buscando las llaves de casa debajo de la luz de una farola, y tras un rato de observarle una persona que pasaba por allí, le pregunto con la intención de ayudarle:
- Buen hombre, ¿qué busca?
- Las llaves de casa
- Y en ¿qué zona cree que se le cayeron?
- Fue allí donde el banco aquel casi seguro
- ¿Entonces por las busca aquí?
- Porque aquí hay luz
Por más luz o comodidad que haya no las vamos a encontrar, si bien sabemos que no están allí, y aunque nos resulte más incómodo, si sabemos dónde buscar, si sabemos qué hemos de hacer, entonces ¿a qué esperamos?
Enlace del vídeo: https://www.youtube.com/watch?v=al0tdan88v0&feature=youtu.be